El cabo Peñes, situado en la costa norte de Asturias, es un enclave natural de impresionante belleza que cautiva a quienes lo visitan. Este paraje, el punto más septentrional de Asturias, se caracteriza por sus acantilados abruptos que caen al mar Cantábrico, ofreciendo vistas panorámicas que parecen sacadas de un lienzo.

 

Su faro, emblema de la zona, se alza como guardián de estas tierras, mientras los senderos circundantes invitan a explorar un entorno donde la naturaleza se muestra en su estado más puro. La biodiversidad que alberga, junto con los colores cambiantes del cielo y el mar, convierten al cabo Peñes en un destino imprescindible para amantes del paisaje y la tranquilidad.